oseph Kramer (1906-1945) fue un oficial de las SS y comandante del campo de concentración de Bergen-Belsen, donde supervisó torturas, ejecuciones y el trato inhumano de los prisioneros. Anteriormente, también estuvo al mando en Auschwitz y Mauthausen, siendo uno de los responsables de la brutalidad del sistema de exterminio nazi.

Apodado «El Carnicero de Bergen-Belsen», Kramer mostró una frialdad extrema en su trato hacia los prisioneros y fue uno de los oficiales más despiadados en la jerarquía nazi. Tras la liberación del campo en 1945, fue arrestado por los británicos y sometido a juicio en el Juicio de Lüneburg, donde fue declarado culpable de crímenes de guerra y condenado a muerte.

Fue ejecutado en diciembre de 1945, dejando tras de sí un legado de crueldad y muerte. Su figura sigue siendo un recordatorio de hasta dónde puede llegar la brutalidad humana cuando se despoja de toda empatía y moralidad.