Otto Adolf Eichmann fue un alto rango del ejército nazi durante la II Guerra Mundial, declarado criminal de guerra en los juicios de Nüremberg.

Eichmann fue uno de los grandes responsables de la «solución final» el Holocausto de los judíos en el territorio del III Reich. Después de la II Guerra Mundial, consiguió huir a Sudamérica y con una identidad falsa consiguió una vida tranquila durante años.

En 1960 fue secuestrado por los conocidos como «cazadores de nazis» judíos de Israel, pertenecientes al Mossad. Recibió un juicio mundialmente televisado en Israel y fue condenado a muerte y ejecutado.